La Liga de fútbol deja muda a la radio
Las emisoras locales son las más perjudicadas por el veto de la
Liga de fútbol, que prohíbe que entren a narrar a los estadios
El pasado 27 de agosto comenzaba una nueva edición de la Liga de fútbol, pero todo no era igual que en pasadas temporadas. La radio, presente en los estadios desde 1927, tenía prohibida la entrada a los campos de primera y segunda división debido a que se negaban a pagar los 20 millones de euros de canon que pedía la Liga para retransmitir los partidos in situ. Ese día las emisoras nacionales improvisaron (y siguen improvisando) como pudieron para narrar los encuentros: unos locutores compraron la entrada y retransmitieron con un teléfono móvil desde dentro del estadio y otros tuvieron que narrar viendo el partido por televisión. Sin embargo, las radios locales, con menos medios y presupuesto, tuvieron que cambiar su programación y dejar a sus fieles oyentes sin escuchar lo que sucedía en el primer partido del equipo de su ciudad.
Seis meses después la cosa sigue igual, las radios nacionales consiguen narrar los encuentros desde el estudio viéndolos por televisión y volcándose con los equipos con más seguidores, pero las pequeñas emisoras que narraban íntegros los partidos de los equipos de su localidad han tenido que renunciar a hacerlo por falta de medios.
Antonio Orts es un estudiante de periodismo que empieza a hacer carrera en la radio colaborando desde el año pasado en los deportes de Radio San Vicente, una emisora local que basa gran parte de su programación en informar sobre los equipos deportivos de San Vicente y Alicante : “Para mí fue una buena experiencia narrar los partidos del Hércules en primera división. Aprendí mucho en poco tiempo”. Antonio seguiría retransmitiendo los partidos del equipo alicantino sino fuera por el veto de la Liga, que sufrió en primera persona: “Fuimos a narrar el primer partido de la temporada del Hércules, pero cuando fuimos a entrar en el estadio estaba la policía custodiando para que no lo hiciéramos, fue una situación lamentable”. Ese día los oyentes se llevaron una sorpresa cuando sintonizaron Radio San Vicente y no pudieron escuchar el partido de su equipo.
Para Antonio, esta situación también perjudica a futuros periodistas: “Las emisoras locales se nutren de becarios, para nosotros esto es un trampolín en nuestra carrera y con este veto nos están cortando la proyección”. Aún así confía en que esta situación “se resuelva pronto” porque para él “el fútbol sin radio no es fútbol”.
Pérdida de oyentes y publicidad
El número de oyentes en las emisoras locales ha descendido como consecuencia directa de no poder retransmitir el fútbol, esto provoca que muchos patrocinadores hayan dejado la radio.
Roberto Prada es un joven periodista con una larga lista de trabajos en radio a sus espaldas. El año pasado comentaba los partido del Hércules para una radio digital llamada Alicante Deportiva y también colabora en la pequeña Radio Millenium: “Yo me ganaba un pequeño sueldo gracias a la narración de los partidos en Alicante Deportiva, pero el año pasado el Hércules, de la noche a la mañana, dejó de darnos acreditaciones. Este año es aún más difícil por el veto de la Liga”.
El caso de Radio Millenium es diferente al resto de las emisoras locales, según Roberto “buscan las maneras más inverosímiles para dar en directo los partidos del Hércules, aunque estos no sean emitidos por televisión ni puedan entrar en el estadio ellos lo narran”. Esto lo hacen para mantener a los patrocinadores, aunque la calidad de la retransmisión baja y, por supuesto, se ve reflejado en la audiencia.
Radio San Vicente prefiere no dar los partidos antes que hacerlo en una calidad peor. El año pasado era la emisora oficial del Hércules, su nombre aparecía en el estadio, en las notas de prensa y en la página web. Este año toda la publicidad que le hacía el club alicantino se ha perdido y el número de oyentes ha bajado considerablemente.
Confían en encontrar solución
Las emisoras perdieron el primer asalto contra la Liga, ya que la jueza encargada de resolver el conflicto dio la razón a los últimos. A pesar de esto, las radios confían en solucionar el problema con ayuda del Ejecutivo (el cual les da la razón) con el que se han reunido para dar solución a este conflicto.
Después de la mediación del Gobierno, las radios en vez de tener que pagar 20 millones de euros deberán pagar 2.5 por el canon. Las grandes emisoras, aunque se niegan, no les supondría demasiado esfuerzo, pero las emisoras locales seguirían igual, sin poder dar a los oyentes lo que quieren ejerciendo su derecho de la información.
Los rumores dicen que el BBVA pagará el dinero que pide la Liga a cambio de cuñas gratis en todas las radios. Esta solución no es la mejor posible, pero al menos las emisoras volverían a las cabinas y dejarían de buscar artimañanas como sobrevolar el estadio con un globo aerostático o subirse a la azotea del edificio más cercano. Mientras se paga o no se paga el canon, las emisoras tendrán que seguir haciendo malabares para informar a los aficionados.
